Crítica de cine: “Paseo de oficina”
“Paseo de oficina” es la tercera película del Rumpy, quien se hizo famoso en Chile por su programa radial “El chacotero sentimental”, espacio donde se ventilan (todavía, aunque el programa tiene otro nombre) los líos amorosos de los chilenos. Este mismo programa dio pie al primer acercamiento del Rumpy al cine , aunque esa vez la película fue dirigida por Cristián Galaz.
Posteriormente el Rumpy dirigiría dos filmes, muy similares en su trama a “El chacotero sentimental”, filmes medianamente graciosos, pero de escaso valor cinematográfico, más similares a un capítulo de la serie “Infieles” de Chilevisión que a una película de tomo y lomo.
“Paseo de oficina” cuenta la historia del típico paseo por el día que realizan muchas empresas chilenas. Espacios que generalmente nacen de las gerencias de Recursos humanos, que buscan una instancia de esparcimiento para los trabajadores. Últimamente, los paseos de oficina suelen agregar varias actividades, e incluso charlas motivacionales. Todo con el supuesto fin de incentivar el compañerismo, el trabajo en equipo, etc. Este humilde crítico ha tenido la oportunidad de asistir a varios de estos paseos, de las empresas más diversas, y la verdad es que en general los empleados (la mayoría) sólo quieren jugar la pichanga y comer el asado, y poco les interesa las actividades extra que la empresa organiza.
La realidad de estos paseos, es recogida de excelente forma por el Rumpy. Estoy bastante seguro que el espectador que haya ido a uno de estas salidas se sentirá identificado con varios de los elementos de la película, e incluso puede que algún representante del área de Recursos humanos con poco humor se moleste un tanto. Con un elenco encabezado por Luis Gnecco, y con la acertada participación del argentino Gastón Pauls, el guión muestra las diversas realidades sociales de una empresa chilena, obviamente en tono de comedia. El resto del casting, está muy bien escogido, y la “caricaturización” de algunos personajes refleja bastante bien la idiosincrasia de varios prototipos chilenos; está el pícaro, medio flojo y mal hablado, como también el chupamedias, el curadito que se pone sentimental y el que sólo quiere huir de ese obligado paseo.
Tal vez aún las películas del Rumpy sufren de ciertos problemas técnicos, algunos encuadres son bastante extraños, y el uso de algunos ángulos de cámara y óptica es más bien sucio. A pesar de esto, “Paseo de oficina” es una comedia bastante digna, al menos la mejor película del Rumpy, que sacará sin dudas, varias carcajadas en el público chileno. Tal vez como dicen por ahí, es cierto que “echando a perder se aprende”.
(c) Por Juan Carlos Berner
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1 Comment
Otra crítica lame-culo. La peli es pésima y hasta yerko puchento se burló pidiendo por favor ir a verla…