Crítica de Cine: “The Iron Claw”
Jamás en mi vida pensé que iba a emocionarme con la lucha libre. No lo tomen a mal, pero nunca he conectado con ella a pesar de ver un par de videos ensayos en YouTube. Sinceramente, luego de ver “La Garra de Hierro”, entiendo por qué la gente la sigue tanto. Todo lo que vemos, a pesar de tener un guion y estar coreografiado, tiene mucha pasión entre medio, una increíble cantidad de esfuerzo. Las personas que participan no solo tienen que saber cómo pelear, también necesitan actuar, improvisar y, sobre todo, resistir.
La historia se centra en los hermanos Von Erich, quienes fueron estrellas en la lucha libre de Texas a principios de la década de 1980. Un período que se recrea en la película con mucho amor, reluciendo junto a la fotografía del filme muchos brillos y detalles excelentes de la época, mientras la historia desarrolla un excelente drama familiar que te conmueve hasta la médula.
“No hay nada falso en lo que hacemos” – Kevin Von Erich.
Kevin es el mayor de cuatro hijos, cuatro personas que viven bajo las reglas y la sombra de su padre, Fritz Von Erich, reglas exhaustivas que van a afectar cada aspecto de su vida, desde el trabajo que tienen, con quienes están, decisiones de carrera, todo. Fritz es un personaje estoico (¡De moda está aquella palabra! ¡Salgan de TikTok!), que vive la vida a través de sus hijos, él incluso enumera quienes son sus hijos favoritos: “Pero las clasificaciones pueden cambiar”, dice él durante un desayuno, “cualquiera puede subir o bajar”. Tiene sobre ellos una forma de control sofocante y aplastante. Además, está obsesionado con tener el cinturón en peso pesado, lo cual jamás consiguió y por ello quiere más que nada que su descendencia obtenga uno.
¿Qué es lo que les impide tener el cinturón? Bueno, todo debería ir bien para ellos, son hermanos que entrenan todo el día, que se esfuerzan al máximo. Además, Fritz les enseñó que mientras sean fuertes, nada malo les puede pasar. Sin embargo, hay una leyenda popular entre quienes los conocen, y dicen que tienen una maldición familiar. ¿Pero qué es la maldición? ¿Algo realmente mágico? Nah. La maldición son las expectativas que pone Fritz sobre sus muchachos, es el hecho de que ponga el peso del mundo en sus hombros sin responsabilizarse un poco de cómo se sienten, siendo imposible hablar con él. Una maldición familiar que ellos mismos crearon.
Es en esto a lo que el filme se centra, no en la lucha libre en sí, se centra en un increíble drama Familiar. En lecciones de estar con ellos que te importan, cortar aquellas cosas que en tu vida te hacen mal. Seguir adelante sobre todas las cosas.
Escrito por Pedro Ascui.
2 Comments
Hola! me dieron ganas de verla. Gracias Pedro por la reseña
¡Muy interesante reseña! Me dan ganas de ver la película 🙂