Crítica de cine: Riesgo Bajo Cero
Si le gusta ponerse nervioso con las escenas en que el protagonista debe estar escapando y solucionando problema tras problema en donde pone en riesgo su vida, esta película es para usted. Y si es fan de Liam Neeson, tanto mejor.
En una mina ubicada en Katka, en Estados Unidos cerca de la frontera con Canadá, se produce un accidente que deja una veintena de mineros atrapados a más de 50 metros de profundidad. La única manera de rescatarlos es traer un artefacto tipo cohete que permite hacer el agujero en la tierra y así poder llegar hasta los infortunados hombres. Pero ese tipo de maquinaria está a kilómetros de distancia, solo puede ser transportado por tierra y las condiciones climáticas no ayudan en nada ya que los caminos están cerrados debido a lo resquebradizo del pavimento. Al no existir conductores capaces de aceptar la peligrosa maniobra, entra la figura de Mike McCann (Liam Neeson), quien con la ayuda de su discapacitado hermano acepta la riesgosa misión.
Este es el tercer largometraje del director Jonathan Hensleigh, quien se tomó las cosas con calma para armar una cinta nada de pretenciosa, con buen cuidado de los efectos especiales, pero no tanto en el hilo de las escenas. Si bien logra entretener, inevitablemente cae en algunos vacíos o escenas que no aportan a la trama en los 110 minutos de metraje. La banda sonora es uno de los puntos altos. Buena fotografía, pero es extraño que no le haya sacado mejor provecho a la zona montañosa en donde se sitúa el filme.
Por su parte, éste representa un nuevo rol en donde Liam Neeson hace de “Liam Neeson”. Actor favorito de películas en donde el móvil es el slogan “ya no es por dinero, esta vez en personal”, Neeson ha caminado entre tumbas, ha viajado por países para rescatar a su hija, ha sido un ladrón sigiloso, y como no mencionar que fue el mentor del mismísimo Bruce Wayne y también un poderoso Jedi. Los papeles en donde se mueve a través de la venganza le vienen como anillo al dedo, y Liam lo sabe. Pero cuidado, ya se le ve cansado, más parsimonioso, y se le nota en las coreográficas escenas de acción y peleas. Pero está bien, Neeson en estos últimos tres años ha protagonizado siete películas, siendo uno de los actores a quien, al parecer, no le ha afectado la pandemia.