Crítica “The Breadwinner”: La sensible tragedia animada
Esta película, junto con “Loving Vincent”, viene a confirmar la idea de que la animación, a estas alturas de la vida, no es sinónimo de infantil o banal. La película, dirigida por Nora Twomey y con Angelina Jolie y Jordan Peele de productores ejecutivos, es otra de las nominadas al Oscar en la categoría de película de animación.
Ambientada en Kabul, Afganistán, durante la tiranía de los talibanes, Parvana es una niña que debe taparse la cara, no puede andar sola, y debe acompañar a su padre lisiado, quien le enseña cosas que deberías estar prohibidas para las mujeres según la sociedad en la que viven. A causa de eso su padre es encarcelado, y al estar su familia compuesta solo de mujeres que no tienen permiso de comprar nada si no hay un hombre con ellas, la niña se ve obligada a vestirse de hombre y gozar momentáneamente de los derechos del género privilegiado.
La temática de la película es pertinente a todos los cuestionamientos políticos e ideológicos actuales respecto a las sociedades patriarcales, y ese podría ser un muy buen punto a favor para ganar el Oscar, pese a que compite con gigantes como “Coco” o “Loving Vincent”. La historia es tremendamente intensa, humana y emotiva. Uno puede empatizar fácilmente con el dolor y sufrimiento de Parvana y su familia, y cuesta no tomar partido por la protagonista.
La historia refleja muy bien el tópico del niño que se ve obligado a madurar rápidamente debido a las circunstancias trágicas, que no le dejan disfrutar de su niñez, algo así como esos animes de antaño como Marco, Remy o Candy. También puede gustarle a quienes hayan disfrutado con Persepolis, porque al igual que esa película animada, también muestra una dura realidad de una cultura distinta a la nuestra, pero mirada con los ojos inocentes pero críticos de una niña que se ve obligada a hacer lo que sea por su familia.
Todo lo que medianamente conocemos sobre el islamismo está ahí: La obligación de las mujeres a usar burka, el trágico destino de las niñas afganas que antes de llegar a su adolescencia ya deben casarse con hombres que podrían ser sus abuelos, el peligro de la guerra, la violencia de los talibanes, etc. Quizá la única crítica que le haría a esta película es que, aunque está basada en una novela, muestra una mirada muy occidental sobre Medio Oriente, que acentúa los elementos negativos, sin mostrar mucho los positivos.
Es una lástima que películas como esta no gocen de una campaña publicitaria como “Coco”, porque la historia es digna de un Oscar. Y eso que Angelina Jolie es productora ejecutiva. Como sea, es una película 100% recomendable, pero si van a verla deben estar preparados para ver un montón de desgracias e infortunios en muy poco tiempo (Imaginen todas las tragedias de Marco o Remy en solo hora y media). Pero aunque la historia está plagada de tragedias, también la acompaña un mensaje emotivo y una bella historia sobre la unidad familiar y la resiliencia (Palabra de moda en estos días).
Por Felipe Tapia, el crítico a quien los años le sientan cada vez mejor