Crítica de cine: “Leyenda: La Profesión de la violencia”
Esta es la historia de los hermanos Reggie y Ronny Kray, gángsters que llenaron de sangre las calles londinenses entre las décadas de los 50 y 60. Amasaron una fortuna disfrazando su imperio de crimen organizado a través de fachadas de exclusivos locales nocturnos.
Como en toda buena historia, real o ficticia, estos dos hermanos estaban unidos por algo más que sangre, de hecho son gemelos, pero eran diametralmente opuestos. Ronny era la mafia por sí mismo, un hombre peligroso, sin límites y totalmente impredecible. Reggie, en cambio, era más cerebral, era quien dirigía de la mejor manera el grupo de gángsters.
En el “East End” de Londres habitaban estos mafiosos siendo controlados de cerca por la policía. Sin embargo, como no podían comprobarles asesinatos ni menos descubrirlos en actos ilícitos, los hermanos Kray hacían de las suyas en las calles londinenses. Mientras Ronny, diagnosticado como un paranoico esquizofrénico (en otras palabras está totalmente loco) sale del Hospital Psiquiátrico de Londres gracias a la intervención de un médico absolutamente “comprado” para tal efecto, Reggie decide ir por cuenta propia a buscar a su chofer que una mañana cualquiera no lo pasó a recoger. Así conoce a Frances (Emily Browning), una preciosa chica que encandila inmediatamente a Reggie comenzando así una linda pero accidentada historia de amor. Ella buscará de todas las formas posibles sacarlo de sus malos hábitos y transformarlo en un hombre de bien, enfriar el lazo que tiene con su hermano Ronny quien no le trae más que problemas y así quedarse con él para siempre…
Los roles de Reggie y Ronny son interpretados por el mismo actor, Tom Hardy, quien ha actuado en varias películas exitosas este último tiempo, como en “El origen”, encarnó a “Bane” en “Batman Dark Knight Rises”, “Mad Max: Fury Road” y “El renacido”. De hecho en el papel de Ronny es muy fácil escuchar al “Bane” de “Batman…”. Tom tiene una interesante actuación de ambos papeles, pero no muy distinta de la misma técnica utilizada en otras películas, como Jeremy Irons en “Mortalmente parecidos”, o los tres papeles totalmente opuestos que interpretó Peter Sellers en “Dr. Strangelove” de Stanley Kubrick.
La película es dirigida por Brian Helgeland, un norteamericano con una prolífica carrera como guionista más que director. En efecto, como guionista es responsable de éxitos como “Pesadilla 4”, “Los Angeles al desnudo” (por quien recibió un Premio Oscar de la Academia), “Río místico”, “Robin Hood”, entre otras. Helgeland dirige sin sobresalir, poniendo mucho foco en las escenas en que Hardy debe aparecer como ambos hermanos Kray en la misma escena. Aunque no son muchas.
La película tiene una rica ambientación y fotografía, aprovechando lugares cerrados y abiertos. Está hablada con un profundo acento británico de la época, lo que más facilita al espectador participar de ella. La música es otro de los factores principales, al mezclar canciones conocidas de la década con otra incidental que funciona muy compenetrada a las imágenes que vamos observando.
De cine negro poco. Lejos de ser una buena película de gángsters o pandillas, se queda en una casi correcta película biográfica, que trata de ser muy cuidada por la doble interpretación presente, pero que queda al debe en lo que a expectativa podamos tener.
“Leyenda” es recomendada para amantes de épocas pasadas, mafia y gángsters. Pero tenga presente lo que le dije.
Por ©Daniel Bernal
En Twitter: @BernalusTwit
Ficha técnica:
Título: “Leyenda” (Legend)
Año: 2015
Elenco: Tom Hardy, Emily Browning, Colin Morgan
Director: Brian Helgeland
País: Gran Bretaña, Estados Unidos
Duración: 134 minutos