Crítica de cine: “Jack Reacher”
Pocas veces la promesa de un trailer es tan distinta a la película misma como en “Jack Reacher”. Las imágenes promocionales del filme hacen parecer que es una película con acción imparable, con un protagonista al que la ley le importa poco y nada, solo hacer lo que a él le parece bien. Y resulta que no es así. No es que el trailer mienta, es solo que toma un elemento muy particular de la película y no recoge la esencia del personaje principal.
Jack Reacher (personaje sacado de las novelas del inglés Jim Grant), es efectivamente un tipo duro, un ermitaño, el típico ex militar multipremiado que se aburrió de la guerra. Sin embargo es además un hombre muy inteligente, respetuoso de la justicia y que utiliza la violencia solo como último recurso. Aunque siempre está dispuesto a usarla. Su principal herramienta para salir adelante no son sus puños, sino su extraordinaria capacidad de observación y buena memoria. “Jack Reacher” entonces, es una película sobre un detective, que recoge varios elementos del cine negro, donde el protagonista es un héroe solitario, poco sociable y traumado. En esta misma sintonía, el personaje de Cruise es un detective a la antigua, que investiga preguntando y mirando, sin usar la tecnología como en las películas de detectives actuales, o como el protagonista de “Misión Imposible” que el mismo Cruise encarna y que depende 100% de sus artilugios para lograr sus objetivos. A pesar de estos elementos del cine negro, que es más bien depresivo, la película se da el espacio para agregar algunos toques de humor, del clásico de las cintas policiales norteamericanas como “Arma Mortal” o “Duro de matar”.
La historia parte con el asesinato de varias personas, aparentemente planificado por un inestable ex militar y francotirador. El crimen se resuelve en tiempo record, y el inculpado pide que sea Jack Reacher quien lo ayude. Este último aparece en escena (de manera casi mágica) y no muy convencido decide participar en el caso. A poco investigar, empieza a atar cabos sueltos y sospecha que el francotirador ha sido inculpado, y se involucra de lleno en el caso para saber la verdad. Entre medio aparecerán una serie de personajes casi caricaturescos, típicos de las películas de detectives, incluyendo a la guapa abogada, a varios matones de poca monta, el viejo fiscal que nunca pierde un caso, y el malo de turno, que está oculto casi siempre y que en esta película es interpretado por el tremendo Werner Herzog (director de películas como “Aguirre, la ira de Dios”).
Raya para la suma: Jack Reacher es una película simple, entretenida (aunque un poco larga), con un guión redondito desde el punto de vista hollywoodense, pero que difícilmente llegará a ser un clásico del cine de acción.
(c) Por Juan Carlos Berner