Crítica de cine: En un lugar del Corazón (Somewhere)

Hay más elementos en la carrera de Stephen Dorff que haber tenido roles menores en series de antaño entrañables como Blanco y Negro o incluso Matrimonio con Hijos. Más que haber sido el primer considerado para interpretar a Jack Dawson  de Titanic y no ganar el papel. Dorff se luce en la interpretación del rol principal de este film junto con Elle Fanning, hermana de la más conocida Dakota, quien promete tanto como ella.

En Somewhere (su nombre original en inglés) Sofia Coppola se centra en el drama existencial de Johnny Marco (Dorff), un joven y treintañero actor de Hollywood que alcanza la fama y se vuelve un superstar, lo cual lo tiene inserto en una vida de mucha compañía transitoria, juerga y sexo en abundancia, chicas guapas, premios y reconocimiento, pero de una profunda soledad y sin un destino demasiado claro.

El nudo dramático se encuadra en el momento que tiene que cuidar a su hija Cleo (Fanning), una pre-adolescente, por unos días lo que profundiza su crisis al abrir un paréntesis en esa rutina, no precisamente por lo fecunda de la relación, inicialmente distante, sino que por el hecho de progresivamente a lo largo de la película se van dejando en evidencia las carencias de ambos: el vacío personal de Johnny Marco y la necesidad de un padre presente por parte de Cleo.

La complicidad actoral y la química entre Dorff y Fanning, ambos con sobresalientes desempeños en pantalla, es algo a destacar en la película. Junto con ello, que la cuarta entrega de Coppola sigue su forma de contar historia ya expresada en las tres que hizo antes, sobre todo en Perdidos en Tokio: dos personajes con mundos propios consistentes y de cómo ambos se interrelacionan teniendo como elementos en común crisis existenciales y un entorno que es más escenografía que integrante del relato.

Es una buena película, que duda cabe, el punto es que si eres de aquellos que tiene dificultades para mantenerse atento y despierto sentado en un asiento de cine acolchado, o que busca acción (y asientos con portavasos, pero sobre todo busca ACCIÓN) esta NO es tu película. Es más bien sesuda, para pensar, con repetidos momentos de silencios entre los personajes que dicen mucho, pero para los que gustan de leer mensajes implícitos en esos silencios. O sea, nada para ver a tempranas horas de la mañana, con sueño y solo. Búsquense una buena compañía que esté en la misma frecuencia de ver una película de segundas lecturas, y todo bien.

Por Jorge Castro

Related post

2 Comments

  • Me encanta el cine que crea Sofia Coppola…Totalmente contemporaneo y alejadísima de tremendo maestro, su padre.
    Sus formas de captar las imagenes con su lente, me encanta desde virgenes suicidas, perdidos en Tokio y claro Maria Antonieta que me hizo pensar distinto de este personaje de la historia…Lo logró!
    Espero que esta sea igual de interesante como sus otras propuestas

  • Que película tan mala, hace mucho que no veía algo tan pobre, la culpa no es de los actores sino de la Dirección, pierden 3 o 4 minutos en una misma escena, ya sea viendo como toma una cerveza, como conduce su carro o como se baña el actor, existen escenas que no vienen al caso, como de relleno, en verdad creo que le falta muchísimo por aprender a Sofia Coppola. Por cierto, el final fue de lo más extraño y te quedas con la sensación que se perdieron 2 horas en contar una historia que pudo ser mucho mejor contada y en un 25% del tiempo empleado para ello. DEFINITIVAMENTE NO LA RECOMIENDO.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *