Conversamos con Sebastián Freund, director y productor de “Stefan v/s Kramer”
Es una de las películas más esperadas del año, y es chilena. “Stefan v/s Kramer” se estrena esta semana, y quisimos conversar con su co-director (en los créditos aparecen 3 directores) y productor Sebastián Freund, hombre con una larga trayectoria, especialmente en televisión, y sin el cual esta ambiciosa producción no estaría creando tantas expectativas en el público y en la crítica especializada.
Esta es una película, que se podría decir es 100% de Stefan Kramer, tanto, que lleva su nombre en el título. ¿Cuánto hay de Sebastián Freund en la cinta?
Yo diría que hay mucho, principalmente en lo que tiene que ver con estructura, metodología, con lo que significa levantar una producción teniendo a un talento como Stefan Kramer y tener un distribuidor de la talla de 20th Century FOX, que por primera vez toma una película chilena. Desde ahí, armar una producción de muy alto nivel y calidad, para que en el futuro exista la posibilidad de seguir haciendo más cine con este distribuidor, con quien firmamos un contrato que nos da una opción para una segunda y una tercera película. Yo siento que mi sello está en esa mirada, en esa arquitectura, que parte con el guión, luego la producción, y así elegir con qué cámara trabajamos, cual será el flujo de post producción cuando lleguemos a esa etapa; por otra parte la forma en que llamamos la atención respecto de la película lanzando tres teasers antes de rodar, y mostrarlos junto a “Harry Potter”, y terminar todo con un traspaso a 35 mm en los estudios de Peter Jackson. Eso es, muy en resumen, mi aporte, mi visión.
¿Qué rol cumplió cada uno de los tres directores (Stefan Kramer, Lalo Prieto y tú) en el rodaje de la película?
Desde mi punto de vista, “Lalo” (Prieto) es el creativo, quien tiene chispazos e inventa diálogos geniales, que sorprenden en el guión. Además tiene una experiencia actoral no menor, y trabajó con Stefan en su último show. Por tanto ahí hay una cosa actoral potente junto a Stefan, que sirvió para sacarle partido a la dirección de actores.
¿O sea que la dirección de los actores estuvo a cargo de ellos?
Te diría que si. Yo tenía una mirada más general, preocupado por ejemplo de la continuidad de las escenas y del filme en un sentido más global. Conversábamos harto entre todos respecto del punto de vista, del tono de las actuaciones, y de cómo debían verse los 19 personajes que Stefan interpreta.
Y la dirección de cámara estuvo a cargo tuyo…
Claro, yo veía esa parte. Lo técnico y la estructura general de la película. Yo puse mi experiencia por ejemplo en la dificultad que era tener a tres personajes interpretados por un solo actor. ¡O a cuatro, cinco y seis! Ese aporte es mío.
Tuvieron algún(os) referente(s) cinematográfico(s) para “Stefan v/s Kramer”?
Si. Stefan es fanático de Jim Carrey, incluso hay una escena que se hizo en el bar del “Negro” en que usamos como referencia una escena cuando Carrey imita a Elvis Presley. Esa la estudiamos y la trabajamos “a la pata”, aunque finalmente no la dejamos en la película. También vimos “Tootsie” “Papá por siempre”, Marley y yo” y así, varias cosas que tenían que ver con la película.
¿Qué comedias te gustan a ti?… ¿directores?
A mi me hacía mucho sentido (para esta película), y me gusta mucho “Tootsie”. De hecho la película (Stefan v/s Kramer) tiene algunos guiños, pero es difícil que alguien los pueda ver, porque son pequeños. Hay ciertos momentos dramáticos, en que la forma de enfrentar las escenas tienen esa influencia, pero como te digo, son realmente muy sutiles.
¿La película fue hecha en formato digital, HD. Hubiese sido posible hacerla en celuloide?
Creo que habría sido posible, pero nos habría puesto en un jaque desde el punto de vista técnico, ya que para hacer los efectos habríamos tenido que transferirlo a digital en 2K o 3K, y después volver a pasarlo a celuloide para su exhibición. Para nosotros era mucho más fácil partir en digital y terminar en 35 mm y así no tenemos que empezar en celuloide pasar por el digital y volver a 35 mm. Pero que era posible, eso si. Aunque más caro.
Yo elegí en qué cámara trabajar, en qué formato. Trajimos una tecnología bien espectacular, una cámara digital Alexa de ARRI, con un grabador que permitía la máxima resolución de registro, que es la misma tecnología que se ocupó en “Los pingüinos de papá” de Jim Carrey. También, antes de rodar, elegimos cual iba a ser el negativo para ampliar de digital a 35 mm y cual iba a ser el positivo. Para eso ocupamos un sistema que emula como se va a ver tu película digital cuando se proyecte en 35 mm. Eso lo aplicamos a cualquier monitor durante el rodaje, o el montajista desde antes podía ver como ser vería finalmente proyectado en 35 mm, aunque estuviéramos grabando en digital.
¿Y esa cámara la trajeron especialmente para la película?
No, la cámara estaba en Chile, pero el grabador (S.two Ob1), que permitía la máxima resolución de la cámara, en este caso 3K, lo trajimos de Londres y después desde Los Ángeles, y cuando grabamos a 2 cámaras en Viña del mar trajimos uno llamado Codex. Todo arrendado obviamente.
¿Cómo llegaron a trabajar con Weta Digital, empresa que hace la post producción de filmes como “El señor de los anillos”?
La verdad es que uno podría pensar que eso es inalcanzable, pues estamos hablando de la empresa donde se hicieron los efectos de “King Kong”, donde se está haciendo “El Hobbit”, y se hicieron cosas de The avengers” y “Prometeus”, realmente de primer mundo, pero para sorpresa de nosotros es una empresa más en el mundo. Los tipos son súper sencillos, no tienen ínfulas de nada, sino que es una empresa que trabaja proyectos en el mundo y que les llamó mucho la atención que de Chile quisiéramos ir allá a hacer las ampliaciones a 35 mm. Es como que a Chile nos llamaran de Vietnam (por hacer una analogía) para hacer un traspaso, sería algo muy extraño. La verdad es que es difícil explicar el grado de profesionalismo de la empresa, es realmente como ir a la Nasa, la copia 0 en 35 mm quedó impresionante. Nunca he visto una copia chilena con esos colores con esa densidad. Yo quedé impactado y fue realmente un privilegio.
¿Y tú fuiste a Nueva Zelanda a supervisar el proceso?
No, fue el director de fotografía, Antonio Quercia. Él fue el afortunado en vivir todo ese proceso.
¿Volverías a hacer una película tan compleja técnicamente como esta?
O sea, ahora hago 20 películas como esta (risas). Después de todo el aprendizaje, de todo lo grabado, después de grabar y equivocarse varias veces hasta salir triunfante, ahora hay un know how impresionante. Imagina además que para poder llegar a la fecha de estreno terminamos trabajando con 6 compañías de post producción especialistas en efectos. Ahora es muy probable que hagamos una segunda película pronto y la vamos a enfrentar con la experiencia vivida de una manera mucho mejor. Ahora hay cosas que ya sabemos que no tenemos que hacer y cosas que aprendimos a hacer para no tener que hacerlas de forma equivocada nuevamente.
Entonces en una segunda parte ¿podría haber nuevos desafíos, en cuanto a movimientos de cámara, efectos, etc?
De todas maneras. Por ejemplo en la película hay escenas que se hicieron con motion control que es un dispositivo que repite el mismo movimiento de cámara varias veces sobre un riel, tanto en paneo como en tilt. Es capaz de hacer movimientos horizontales y verticales mientras se mueve en el riel, entonces las posibilidades son muy entretenidas. Hicimos una escena donde Stefan hace al presidente, al alcalde, al millonario y al entrenador, mientras la cámara se está moviendo, ¡y los personajes se están moviendo más encima! Fue una coreografía muy rica, entretenida, pero para lograr esos 50 segundos nos demoramos 4 días en grabarla. Finalmente si, realmente se pueden hacer cosas increíbles.
¿Qué fue lo más difícil de hacer de la película?
Lo más difícil, primero conocernos, con Stefan, con “Lalo” (Prieto), con el resto del equipo. Tener la capacidad de comunicarnos, de explicar los puntos de vista de cada uno, y enfrentar todos los desafíos técnicos, los procesos, etc. Y en cuanto a los momentos, que yo recuerde, el más difícil fue Viña del mar. ¡Tuvimos que emular el Festival de Viña!, no sólo en la cantidad de gente, sino la producción, escenografía, iluminación, todo. Nos volvimos locos haciendo esa escena. Recuerdo que cuando hablamos de esta escena al comienzo decíamos cosas como: “Estás loco, ¿como vas a llevar a 15.000 personas?” No le íbamos a pagar a 15.000 extras, era imposible. Lo bueno es que trabajamos con un socio que nos compró la película en verde que es Chilevisión, que es el canal que hace el Festival, y ellos nos contactaron con la gente que hace la parte técnica y escenográfica del Festival, y aunque era carísimo (no nos íbamos a gastar un tercio del presupuesto de la película en 3 días), al final todos esos molinos los fuimos venciendo. Además la Municipalidad de Viña se portó increíble, así como el Hotel O’Higgins…
¿Esta es probablemente, la escena más compleja de la historia del cine chileno en términos de producción?
Si, yo creo. Además que no sabíamos lo que iba a pasar. Llamamos a una conferencia de prensa con Stefan y la alcaldesa en Viña, y además produjimos amigos, como el grupo La Noche, porque a la gente se la convocó a las 6 de la tarde, pero teníamos que grabar cuando ya estuviera oscuro, porque Viña es de noche. Esto lo hicimos en 3 días; un día sin público, un día con poco público en el palco, y el otro con todo el público. El segundo día me acuerdo que íbamos a hacer las tomas desde el punto de vista del público y todo falló. El grabador no grababa, la prótesis del personaje que le tocaba a Stefan no funcionó, se rompió y no estaba la persona que podía re hacerla, en definitiva, no pudimos hacer nada. Imagina como estábamos el tercer día que había que grabar al público, sólo tomas en over shoulder (sobre el hombro de Kramer en este caso) y teníamos que hacer todo en 2 horas, utilizando una grúa de 14 metros, y varias otras cosas, pero bueno, al final todo salió bien y recreamos el Festival de Viña.
¿Cuáles son tus expectativas para el filme?
Mis expectativas son, que la gente nos elija porque hemos trabajado muy profesionalmente, porque tenemos a un talento de la talla de Stefan que tiene muchos seguidores y es muy querido, piensa que en Facebook tiene más de un millón de seguidores y es número 1 por lejos en Chile, así que las expectativas son altas aunque yo soy más conservador, igual que Fox que está pensando en 500 mil espectadores, así que ojala que convoquemos a ese público que a veces es esquivo con el cine nacional y podamos de hablar de números bien grandes y sino, al menos que la gente que la vea la disfrute. Nosotros ya cumplimos con la misión de poner la película en todas las pantallas de Chile de Arica a Punta Arenas, de forma simultánea, con 100 copias. Ahora depende del público.
¿Con cuántos espectadores se paga la película?
Mira, yo calculo que logrando entre 300 y 400 mil espectadores la película recupera lo invertido, aunque después vienen las distintas ventanas, como el VOD, la TV abierta, y otras formas de ingreso y ojalá de marcar algunos hitos.
¿Cuántas copias habrá de la película en todo Chile?
Más o menos 100 copias, algunas en 35 mm, otras en digital para las salas 3D, pero estamos preparados para, que si la cosa anda bien, aumentar la cantidad de copias en digital. Creo que esta película ya tiene varios hitos entretenidos y esperamos que eso nos juegue a favor, y que así cumplamos este gran sueño.
(c) Por Juan Carlos Berner
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