Crítica de cine: “Las edades del amor”
“Divorcio a la italiana” fue una película que en 1961 logró identificar a todo un país con lo que se entendía como la vida costumbrista. La realidad de Florencia, Venecia, Roma y la retratada en la película Sicilia, eran tan distantes como nosotros podríamos decir vivir en Santiago, Los Andes o Temuco, por lo que el valor de la película fue el poder lograr confluir las nacionalidades locales y unirlas bajo un mismo rótulo. La película hablaba de la sociedad, de la vida cotidiana, y de algún modo trasuntaba una idea de “italianidad” que todo espectador sentía familiar. La vida en la calle, la capacidad de asombro, la picardía y sobretodo el romanticismo se posicionaron a tal punto que a pesar del momento social y las diferencias propias de un país fracturado unificaron al italiano común con una idea de lo que somos, podemos y queremos ser. La película de Pietro Germi se convirtió en un fenómeno transversal, cautivó a las salas comerciales, a la crítica especializada que la premió en Cannes y los Oscar, y a la cultura italiana que la perpetuó como la consolidación del genial Marcello Mastroianni y el manual de trabajo de lo que pasaría a la historia como la Comedia Italiana.
“Las Edades del Amor” es el nombre con el que llega a Chile la tercera entrega de la saga “Manuale D’Amor”, la superproducción italiana que se ha posicionado como una de las más exitosas del último tiempo y que se ubica como una continuidad de esa tradición clásica del cine italiano que cada cierto tiempo nos trata de recordar qué son y qué quieren ser: vivaces, espontáneos, apasionados y por sobretodo románticos.
En base a tres relatos, “Juventud”, “Madurez” y “Más Allá”, la película busca unificar el sentimiento pero externalizar la forma. La idea del amor y el romance se convierte en el vehículo que justifica el viaje, mientras cada parada es la libertad y particularidad de cada persona, momento y relación. Esta diversidad es la que permite que personajes de distinta naturaleza se presenten frente a cámara y se desenvuelvan libremente permitiendo momentos de humor físico seguido de diálogos épicos que llevan al espectador a recibir historias distintas, independientes y propias del lenguaje de la comedia italiana
Con Mónica Bellucci y Robert De Niro como grandes atractivos, “Las Edades del Amor” entrega a la cartelera local una diversidad necesaria y atractiva para quienes buscan alejarse de la “comedia romántica” y el “bromance”, que dominan los blockbusters de este año. La comedia picaresca, la comedia física, la comedia italiana se mueve libre mientras la cámara retrata el romance, la belleza, y la vida de la Italia fresca y transversal que imaginamos y que aparentemente sigue tan viva como la recordábamos.
©Ignacio Hache
@Ignacio_Hache