¿Quién es Apocalipsis, el nuevo villano de X-Men? El capitalista desmedido y evolucionista fanático.

 ¿Quién es Apocalipsis, el nuevo villano de X-Men? El capitalista desmedido y evolucionista fanático.

O sea, nuevo nuevo no es, al menos en el comic. El villano más reciente de la franquicia cinematográfica de X-Men no tuvo un inicio muy memorable: De apocalipsis tenía solo el nombre, y era básicamente otro megalómano más del montón, queriendo apoderarse del mundo y con una gama de poderes variopinta y sofisticada. Además, era un villano de la colección X-Factor, que en esos tiempos era el primo pobre de X-Men, reuniendo al reparto original de los alumnos de Xavier: Cíclope, Jean Grey, Bestia, Ángel y Hombre de Hielo.

Todo cambió cuando el matrimonio Walter (En los dibujos) y Louise (En los guiones) Simonson se hicieron cargo de la colección. Ahora Apocalipsis no solo tenía el nombre de un libro de la Biblia: Tenía cuatro jinetes a su cargo, y su meta no solo era conquistar el mundo, sino forzar hasta los límites la evolución y la competencia entre especies para que sobreviva el más apto. Era, en cierto modo, un Darwinista fanático y un capitalista fundamentalista, pues para él la esencia de la existencia era que se debía competir y que solo los fuertes sobrevivían, llegando a ser un ejemplo de las miles de racionalizaciones y extremismos de las leyes de la naturaleza que muchos han usado para justificar atrocidades e injusticias de todo tipo. Todo esto alimentaba un debate dentro del comic que lo tornó inmediatamente interesante, y devolvió a la franquicia mutante aquello que había perdido: el debate acerca de la tolerancia, el derecho que tiene el fuerte para someter al débil, la coexistencia pacífica, la diferencia, etc.

No conforme con esto, Apocalipsis fue uno de los pioneros en valerse de la ciencia tecnoorgánica, tan usada posteriormente en el Universo Marvel, para crear a Arcángel, un personaje que se volvió popular dentro de poco. Además, se vinculó a Apocalipsis con el hijo de Cíclope y Madeleine Pryor, pues el niño fue secuestrado y llevado a un futuro distante en el que se convirtió en Cable, un miembro de la resistencia contra En Sabah Nur, el verdadero nombre del villano que alguna vez fue un esclavo de Ozymandias (Ramses) en Egipto, pero que luego de enfrentarse a Rama Tut, (Kang el Conquistador, descendiente de Doctor Doom y villano ocasional en “Los Cuatro Fantásticos”),  llegó a la racional y lógica conclusión de que más allá del bien y del mal estaban las leyes de la naturaleza, y que en este mundo solo sobrevive el fuerte, que puede someter al más débil.

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Para enriquecer aún más al personaje, y como él mismo dijo para añadir una perspectiva histórica a su causa, él ha sido el dios de la guerra o el mal en muchas culturas: fue Seth en Egipto, fue Huitzilopochtli en Mexico, Kali-Ma en India, Sauru en Persa, etc. Y su capacidad para modificar su apariencia, tamaño, teletransportarse, volar, lanzar rayos, super fuerza y otros tantos poderes, no dejaban duda de su categoría divina, por no mencionar sus ancestrales conocimientos de tecnología, siglos más avanzada que en su época (Tomada de los Celestiales, raza extraterrestre recurrente en “Los Cuatro Fantásticos”), la que sea en la que esté. En ocasiones ha sido considerado uno de los Eternos, que son mutantes que pueden vivir, como su apodo lo explica,  eternamente. Así, Apocalipsis era un villano que existía en el pasado, presente y futuro. Incluso se nos reveló que Siniestro llevaba siglos trabajando para él y rindiéndole cuentas, lo que hace a Apocalipsis más temible aún, porque si un tipo tan espantoso como Siniestro no se manda na solito y responde ante otro villano, este último tiene que ser de lo peor. De esta forma, Apocalipsis fue un villano que se fue construyendo de a poco, y fue el resultado de los esfuerzos de varios guionistas, lo que lo enriquece aún más como personaje. También fue uno de los antagonistas más peligrosos en la serie animada de los 90 de “X-Men”.

Algunas de las sagas en las que Apocalipsis no dejó duda de su lugar en el panteón villanesco, fueron por ejemplo “La Canción del Verdugo”, en la que se descubrió que por culpa de Apocalipsis existían villanos de la categoría de Stryfe. También “Los Doce” fue otra saga en la que quedaba claro que era un villano decisivo en la historia de los X-Men. Pero probablemente la más emblemática fue “La Era de Apocalipsis”, en la que Legion, el hijo de Xavier, viajaba al pasado y accidentalmente mataba a su padre, haciendo que Apocalipsis tomara el control de America y precipitaba un enfrentamiento nuclear con Eurasia, acabando con el mundo, en una realidad paralela en la que todos los personajes eran peones y habían cambiado su papel: Dientes de Sable, Éxodo, Sapo, Mente Maestra y Magneto eran de los buenos, mientras que Cíclope, Havok, Bestia, y Cannonball eran villanos. En esta realidad paralela incluso Apocalipsis tenía un hijo, llamado Holocausto, que terminó arrancando a nuestra dimensión.

Creo que lo que ha hecho de Apocalipsis un villano interesante es que es un personaje cuyas motivaciones son bastante realistas, incluso más que las de Magneto. Magneto es un personaje que quiere vengarse, que cae en la falacia de la generalización, la cual es bastante fácil de rebatir: No todos los humanos son malos, lo mismo pasa con los mutantes. En cambio Apocalipsis se ampara en las leyes de la naturaleza, lo que hace que su ideología cobre mucha más fuerza. Incluso y con temor a ganarme el odio de muchos, diría que los ideales que Apocalipsis defiende son mucho más complejos que los de Magneto, por eso es que es tan terrible. La lógica de Magneto es básicamente “Unos humanos me hicieron sufrir, voy a odiar a todos los humanos”. Pero En Sabah Nur cuenta con respaldos filosóficos, políticos, científicos, históricos y biológicos que le dan solidez a su propuesta ¿Cómo no temerle a un tipo así?

De hecho, Apocalipsis ni siquiera piensa que lo que hace sea algo malo, y abraza su causa con la misma pasión y fanatismo que muchas personas en el mundo real que creen tener la razón. Él es la representación de la competencia desenfrenada, de la puesta en práctica de la ley de supervivencia sin una cuota de compasión, del supuesto derecho a aplastar al más débil solo porque puedes, desprovisto de toda moral o civilización. El multiforme de labios azules cree que las especies están destinadas a competir para ver quién es la más apta para sobrevivir en una naturaleza hostil, y que él solo fuerza y acelera este proceso, alentando a las diferentes formas de vida para definir quién es el que merece vivir y quién no. Apocalipsis es un recordatorio de que no solo los adherentes al creacionismo divino pueden ser fanáticos, y que la ciencia, la que supuestamente es exacta y confiable, también puede empujarnos al fanatismo irracional y dogmático. Apocalipsis es lo que todos seríamos si no hubiésemos construido el andamiaje de ética y civismo que da sentido a nuestra existencia más allá de meramente sobrevivir. ¿Estará el villano de la película a la altura de este personaje de los comics? Lo sabremos dentro de poco.

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