Entrevista a Ernesto Díaz, director de “Mandrill”

ernestoA propósito de “Mandrill”

La nueva película de la dupla creativa de Ernesto Díaz y Marko Zaror, “Mandrill” ya llevaba un largo camino recorrido, desde que saliera de la sala de montaje hasta su pasado estreno comercial a principios de septiembre con 29 copias dentro de la cartelera nacional.  Dos salas en Valdivia el año pasado fueron la única vitrina entre el público chileno y esta producción, la cual se habría estrenado el pasado mes de marzo de no haber ocurrido el terremoto.

Aún así, su director está tranquilo. Los premios obtenidos en 2009 en el Fantastic Fest en Austin Texas y el premio para Marko Zaror del pasado festival Action Fest en Estados Unidos, no sólo cumplen las expectativas  sino que confirman que el cine de Ernesto Díaz va por la vía correcta.

En Chile se está conociendo, afuera ya la vieron ¿Qué opinas de la recepción del público hacia “Mandrill”?

“Bueno, hasta el momento ha sido buenísima. Ha funcionado. Hay todo tipo de opiniones, pero en general la crítica ha sido súper positiva. Y muchos me han comentado que es la mejor de las tres películas que he realizado, entonces con eso ya estoy satisfecho.”

¿Y cómo fue el proceso creativo en comparación con “Kiltro” (2006) y “Mirageman” (2007)?

“Fue la más difícil, creo yo.”

Hubiéramos creído lo contrario ¿porqué la más difícil?

“Lo que pasa es que estábamos contra el tiempo. Una vez listo el presupuesto teníamos la opción de hacerla en determinado período de tiempo o no hacerla. O retrasar un año la realización de la película. Y para hacerla necesitábamos tirarnos a filmar sin guión, sólo con una escaleta que tenía como cuarenta páginas. “

Fue una decisión arriesgada

“Obviamente decidimos filmarla y prefería hacerla a no hacerla. Prefería darle prioridad al lenguaje cinematográfico que al literario y seguir escribiendo el guión. Y bueno, nos tiramos a la piscina. Pero después, ir escribiendo sobre el rodaje, inventando e improvisando, fue durísimo, muy difícil y estresante y sin dormir mucho.”

¿Y qué te pareció en su momento el resultado final?

En Austin (Texas) fue la primera vez que vi la obra final terminada un cien por ciento.

¿No pudiste verla antes de competir en festivales?

“Así es, terminamos la película en post producción y nos subimos al avión con la cinta digital para ir al festival. Todo lo que había hecho antes era verla en pruebas. Pero ya la versión final, de imagen y sonido juntos, la vi recién en ese festival. Y fue una grata sorpresa obviamente ganar el premio, porque sin saber como la película funcionaba con una sala con más de 200 personas, llena, obviamente uno no sabe a la que va.”

El festival Fantastic Fest que se realiza en Austin, Texas, es el festival especializado en cine fantástico, horror, ciencia ficción y cine de acción más grande de Estados Unidos. Su público es fanático y por ello conocedor de todos los guiños incluidos dentro de la película “Mandrill”. Las expectativas generadas por “Mirageman” eran altas (de hecho, se prepara un remake de esa película, “Defender 3D”, sin la dirección de Ernesto Díaz). Por ello los premios de mejor película y mejor actor, fuera de la categoría horror,  generaron el mejor puntapié inicial jamás imaginado para una película de estas características. Sitios especializados como http://twitchfilm.net lo confirman.

Gajes del Oficio
Varias semanas previas a la fecha de estreno original, era posible ver en el paseo Ahumada una persistente imagen de un Marko Zaror semidesnudo, publicitando una marca de calzoncillos, caracterizado como una especie de agente secreto
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¿Te complica realizar escenas con placement

Obviamente complican, pero lo importante es hacer esos acuerdos con tiempo dentro del proceso de pre-producción, para que se pueda hacer un placement que no toque ni perjudique tu historia. Y eso necesita un tiempo extra de trabajo y concentración. Cranearse y romperse la cabeza para que funcione, sino se arruina una escena completa.

¿Cómo surge tu alianza con el casino Atlantic City?

¿Atlantic City? Bueno, yo siempre he sido de la idea del “Mariachi”, es decir de hacer películas alrededor de las cosas que tenemos y lo que nos podemos conseguir. Nunca escribo un guión, y luego veo cómo lo hago, sino que escribo un guión alrededor de locaciones y gente con la que sé que puedo trabajar. Y el Atlantic City es un casino que es de la familia peruana de Marko Zaror.

¿Te habían ofrecido antes filmar en Perú?
Siempre nos ofrecieron que fuéramos a filmar allá, hace tiempo, desde “Kiltro”, pero no se daba la oportunidad, no sé, lo encontrábamos difícil. Ir era igual de caro, hasta que de repente el casino tuvo un sentido total en “Mandril”, como historia a la James Bond. Ahora funcionaba y entonces se escribió, sabiendo que teníamos eso. Al revés hubiera sido muy complicado, porque filmar adentro de un casino cualquiera son miles y miles de dólares en derechos y permisos

¿Cómo es tu relación con Marko, el coreógrafo de peleas?

Es una relación difícil, porque si bien somos amigos y todo, al momento de hacer una escena de acción, entra en batalla el ángulo de cámara, para que la patada se vea más linda, y el ángulo de cámara que corresponde para la narrativa que lleva la película en ese momento, entonces siempre hay debate y hay que llegar a consenso de porqué la cámara va ahí. Y por supuesto no es algo fácil, hay que discutirlo y es un trabajo largo.

¿Y con Nicolás Ibieta, tu director de fotografía?

Con el Nico somos súper amigos. Él ha sido el director de fotografía de las dos últimas películas, “Mirageman” y “Mandrill”. Tenemos una visión del cine muy parecida, los mismos referentes, nos llevamos muy bien en el rodaje, nos complementamos porque el Nico tiene muy buenas ideas, es muy creativo.

Hablando de referencias, tu gusto musical recuerda a Tarantino y el uso qué él le da en sus películas ¿Es una influencia directa?

“Si, totalmente. De hecho, Tarantino es mi escuela de cómo abordar el género, sobre todo en “Kill Bill”. Ese sentido del humor, la ironía, el no tomarse muy en serio, viene de ahí. Creo que es un buen ejemplo de cómo hacerlo. Específicamente en esa película. Y el gusto musical de Tarantino es muy parecido al mío. Cuando yo escuché el soundtrack de “Perros de la calle” sin haberla visto, quedé loco. Y toda la música Surf, la del spaghetti western yo creo que estoy destinado a tener un parecido sonoro.

Entonces con el sonido Tarantino vas a tener una eterna competencia.

“Yo me acuerdo cuando estaba en el colegio y escuché “Little green bag”, dije “esta canción hay que usarla en una película, la tengo que usar en un corto”. Entonces un amigo me aclaró que era el tema central de “Perros de la calle”, y dije “¡Pero como…No puede ser!” y así ha sido mi relación con la música de Tarantino. Casi siempre me ha pasado y me da rabia en verdad, porque él es Tarantino y yo soy sólo Ernesto Díaz”

Otros recursos que destacan son los del agente 007 ¿Pero cuál de todos?

El referente de James Bond que prefiero son, sobretodo, las películas de Sean Connery, especialmente “Goldfinger”, “Los diamantes son eternos”, también la de George Lazenby “Al servicio de su majestad”. También hay algo de “El hombre del revolver de oro” que es de Roger Moore, pero en el fondo las primeras, las de la década de los 60 y 70. La estética es como de cine de explotación, en el fondo imitaciones de James Bond, de los Derek Flint, y de muchos otros títulos.

¿De donde surge el recurso que usaste en “Mandrill” de congelar la imagen en dos tonos según lo que siente el personaje?

Ese recurso viene de animaciones japonesas ochenteras. Ése específicamente yo lo saqué de “Súper agente cobra”. Era un clásico recurso de terminar una secuencia o un acto y quedaba en pausa el sonido japonés, luego quedaba un blanco y negro y se evidenciaba el trazo del lápiz del dibujo animado.

¿Debes enfrentar a menudo el tema de derecho de autor?

“Es una negociación súper larga y difícil.”

¿Cómo hiciste para ocupar la canción “Modern Love” de David Bowie en “Kiltro”?

“Podría haber gastado mucho dinero del presupuesto, pero uno empieza a mandar mails y a decir que se trata de una película chica, que necesitamos el apoyo. Por ejemplo, en el caso de la canción de Bowie, la negociamos para tener sólo los derechos en Chile para mostrarla en cine, con fines de lucro. En festivales puede ser en cualquier parte del mundo y en DVD en cualquier parte del mundo.”

¿Y si hubieras tenido que distribuir “Kiltro” comercialmente en salas de cine del mundo?

“Hubiera tenido que cambiar la canción o pagar los derechos para mostrarla en ese contexto. Pero nos hicieron un precio irreal.”

Para Ernesto Díaz lo de hacer cine está en la sangre. Actualmente escribe la última versión del guión de lo que será su cuarta película. Una vez que se corrija, iniciará la preproducción.

¿Tiene tu próxima película un título definido?

“Si, se llama “Santiago Violenta” y es un policíaco gansteril, no es una película de artes marciales. No es con Marko Zaror. Con él nos vamos a reunir después. Vamos a dejar pasar un tiempo para que haya un descanso.”

¿Demasiadas tensiones?

No, es que se puede saturar la relación. Tenemos que motivarnos con una nueva historia. Puede ser, creo que  es fome hacer una película altiro de nuevo. Y no digo que la película puede llegar a ser fome, sino que lo fome sea el hacer la película. Entonces ahí perdería todo el sentido.

¿Y de qué se trata?

“Santiago Violenta” es una película de mafia, pero los protagonistas no son mafiosos, sino un grupo de amigos comunes y corrientes que están llegando a los treinta y siguen pegados, piscoleando los fines de semana. De repente se meten en un lío con un bolso de dinero en el centro de Santiago. Ahí se sumergen en una aventura con pistolas, mafiosos…en el fondo tres amigos normales metidos en una película de mafia.”

¿Vas a renovar tu equipo de trabajo o te quedas con tus colaboradores?

“Quiero trabajar con las cabezas con las que ya he trabajado, sobretodo en “Mandrill”, ya es un equipo consolidado, sobretodo Rocco (compositor de la música), Nicolás Ibieta (director de foto) y Mauricio Céspedes (Director de Arte). Además de Derek Rundell, mi socio gringo que es quien ha producido todas mis películas. Ese es por ahora mi equipo sólido y de ahí surgirá el resto de colaboradores que hagan falta.”

Por Hugo Díaz

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2 Comments

  • Buena entrevista, a propósito de Mandrill.
    Ojalá que Díaz siga haciendo cine, y harto, y que todos se acostumbren a consumir cine chileno, que no es sólo cine del 73 para los que creen.
    Saludos

  • Buena entrevista, tuve el gusto de ver Mandrill hace un año en Valdivia, repito mis felicitaciones a Ernesto y todo el equipo!

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