Crítica de cine: “Jojo Rabbit”

 Crítica de cine: “Jojo Rabbit”

A pesar de que ha transcurrido casi un siglo, la Segunda Guerra Mundial sigue siendo uno de los episodios más trágicos y horrorosos de la historia humana. Muchos de los que estuvieron ahí siguen vivos y la mayoría no pudo superar jamás el trauma de estar en ese trance histórico.

Es por eso que tratar este tema como una comedia, requiere no solo de valentía, sino de una extraordinaria inteligencia para no caer en algo burdo. Roberto Benigni ya lo había hecho en “La vida es bella” pero en un tono más dulzón, a diferencia de la descarnada sátira que ahora nos presenta el genial Taika Waititi.

Johannes (o Jojo) es un niño de 10 años que pertenece a las juventudes nazis, como lo fueron muchos jóvenes en esa época. Recordemos que Hitler realizó grandes esfuerzos para concientizar a los alemanes desde niños a seguir su ideología. Como tal, el pequeño Jojo odia a los judíos, pues le han dicho que son una especie de “monstruos con cuernos, cola y poderes sobrenaturales”.

Un día Jojo descubre que en el techo de su casa vive oculta una joven un poco mayor que él, muy enigmática además de bonita, que para mala suerte de Jojo, es judía.

Este es el punto de partida de esta genial película, que no solo se agradece por ser tremendamente original en su relato, sino además por ser muy audaz en hacernos reír (a carcajadas) con un tema profundamente doloroso. Waititi nos muestra la guerra a través de los ojos de Jojo, quien tiene como mejor amigo imaginario al propio Hitler (interpretado por Waititi), con lo cual entendemos por qué para el niño los nazis son lo mejor y deben ganar la guerra, algo que de alguna forma debió ocurrir en la mente de muchos niños criados bajo el Reich.

“Jojo Rabbit” nos traslada a través de esta historia terrible, haciéndola tierna y divertida (realmente graciosa), además de tener muchos giros y sorpresas, con un guion muy bien elaborado, llevado a cabo por tremendos actores que nos regalan personajes entrañables.

En particular es destacable el trabajo del pequeño Roman Griffin Davis (Jojo) quien se roba el corazón de los espectadores, pero también el encantador papel de Scarlett Johansson como la madre del niño, y en especial el rol de Sam Rockwell como el capitán que se hace cargo del entrenamiento de Jojo, personaje en el cual Waititi encarna toda la estupidez que hay implícita en el pensamiento nazi.

Una película fantástica que se merece con creces sus 6 nominaciones al Oscar y que es mi apuesta a llevarse el premio a Mejor guion adaptado.

Por Juan Carlos Berner

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